Préstamo Hipotecario
Los costos para acceder a una vivienda son altos y por lo general las personas no cuentan con todo el dinero necesario para poder comprarla. Una alternativa es solicitar un préstamo hipotecario.
¿Qué es un préstamo Hipotecario?
Préstamo Hipotecario es aquel producto mediante el cual una entidad financiera entrega una determinada cantidad de dinero a una persona física para adquirir una casa, quien asume el compromiso de devolver el capital más intereses correspondientes en un plazo de tiempo. Este tipo de préstamos cuenta con una garantía específica que es una hipoteca sobre la casa (bien inmueble).
Si el cliente no cumple con los pagos de las cuotas, la entidad financiera puede embargar el inmueble dado en garantía (hipotecado). Posteriormente dicho bien puede ser vendido para cobrar el resto de deuda.
Al contar con garantías que atenúen el riesgo de contraparte, las tasas de interés que cobran las entidades financieras por los préstamos hipotecarios son más bajas y los montos de financiamiento más altos que en otros préstamos sin garantías, como los personales o de consumo.
¿Cuánto dinero se puede pedir mediante un préstamo hipotecario?
Para determinar el monto o cantidad de dinero a otorgar, la emitida financiera tiene en cuenta los ingresos del solicitante (rol de pagos o facturas), el total de préstamos o deudas en el resto del sistema financiero y el informe de crédito.
Adicionalmente, el importe de la operación no podrá superar un porcentaje del valor del bien que se entrega como garantía. Para fijar el límite se tienen en cuenta distintos parámetros.
- Adquisición de primera vivienda: cuando el bien a adquirir es la vivienda única destinada a residencia permanente del solicitante, el porcentaje al financiar generalmente va del 70% al 100% del valor del bien.
- Programas de fomento de zonas geográficas: en algunos casos los gobiernos desean promocionar el desarrollo habitacional de barrios o ciudades por lo que aumentan los límites máximos de las financiaciones.
- Segunda vivienda: generalmente el monto de las financiaciones destinadas a la adquisición de una segunda vivienda no llegan al 100% del valor del bien.